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Podrán existir otras dificultades, pero por falta de mercado no
va a ser: en México hay niños, más de 32 millones de
menores de 14 años según datos del último
censo.
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Y
la tasa de natalidad continúa siendo muy elevada, lo que hace de este
país, pese a las condiciones económicas desfavorables de los
últimos años y los elevados índices de pobreza de una gran
parte de la población, un amplio y atractivo mercado para el juguete
español.
No
podemos olvidar, además, que México constituye la décima
economía en tamaño del planeta, y que existe un numeroso segmento
de mexicanos que disfrutan de un alto poder adquisitivo. |
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A esto
cabría añadir que las similitudes culturales que existen entre
España y México están muy acentuadas. Un ejemplo muy
significativo de esta afinidad es que los niños mexicanos todavía
reciben sus regalos de manos de los Reyes Magos de Oriente.
Esta
circunstancia otorga a los juguetes españoles una importante ventaja
competitiva frente a terceros países, particularmente en algunos
segmentos como los juegos de mesa o los educativos.
Además, la existencia del Tratado de Libre Comercio entre
México, los Estados Unidos y Canadá (NAFTA, por sus siglas en
inglés) abre de par en par las puertas de esos países a los
productores que decidan instalarse allí.
La
posición de España en este mercado es bastante fuerte. Desde 2002
es el cuarto exportador de juguetes a México, con una cuota cercana al
4%, aunque con una pérdida paulatina de cuota de mercado a favor de
China, el principal competidor, que cuenta con una participación cercana
al 60%.
México fue en 2004 el sexto país receptor de juguetes
españoles y realizó compras por valor de 21,9 millones de euros,
la cifra más baja de los últimos cuatro años debido a la
fortaleza del euro. Sin embargo, si tomamos las cifras hasta el año de
la crisis, las exportaciones de juguetes españoles a este mercado
experimentaron en cuatro años un incremento del 514%.
Tendencia estable
En la
actualidad el sector está remontando el bache lentament.
La
evolución de las exportaciones españolas al país azteca se
debe principalmente a la entrada en vigor en 2001 del Tratado de Libre Comercio
entre México y la UE, cuya finalidad es eliminar progresivamente los
aranceles entre las dos zonas:
Las
importaciones mexicanas de juguetes se incrementaron un 100,24% entre 1998 y
2003, lo que unido a la fuerte competencia de precios que existe en el mercado
ha hecho que, en apenas 10 años, 88 empresas manufactureras mexicanas
hayan desaparecido. Los fabricantes mexicanos tienen fuerza en creaciones
tradicionales como los juguetes de madera, pelotas y muñecas, mercado
este último en el que México es el tercer fabricante a escala
mundial sólo por detrás de China y España.
En
México operan fundamentalmente tres tipos de compañías,
las multinacionales Mattel, Hasbro, Lego y Nintendo, principalmente, que tienen
una cuota de mercado del 60%; las compañías mexicanas que
fabrican juguetes tradicionales, que cubren el 30% de la demanda; y los
importadores de productos de otros países, que copan el 10%
restante. Control aduanero
Las
autoridades mexicanas exigen la inscripción del importador en un
padrón sectorial y siguen un exhaustivo control de cumplimiento de los
requisitos de las mercancías que entran en el país con el objeto
de detectar actividades fraudulentas. Para prevenir posibles retrasos o
problemas en la aduana derivados de estos severos controles, resulta
recomendable contar con un agente experto.
Sin
embargo no son ni mucho menos los problemas aduaneros los que más
afectan al fabricante español:
- Como explica la Oficina Económica
y Comercial de la Embajada de España (Ofecomes) en México, "las
importaciones ilegales de juguetes se han transformado en uno de los problemas
más graves a los que se enfrenta esta industria. China es el origen de
la mayoría de los juguetes importados de forma ilegal y se está
luchando frente a este problema en coordinación con las autoridades
mexicanas".
- Pocas son las cosas que los empresarios
pueden hacer acerca de la debilidad del dólar frente al euro,
quizá el problema más importante para la industria
española del juguete. Para José María Castellano, director
comercial de Juguetes Falomir, una empresa con presencia en el mercado mexicano
desde hace ocho años, las opciones han sido "tratar de convencer a los
clientes mexicanos de que la empresa es capaz de absorber el coste del euro y
desviar la fabricación de algunos productos a China para poder venderlos
en dólares. Lo que no podemos hacer es abandonar un mercado que ofrece
más compradores que los que existen en España".
Numeroso mercado
Son los
segmentos de población medio y alto, debido a su alto poder adquisitivo,
los más atractivos para la oferta del juguete español.
Son los
segmentos de población medio y alto, debido a su alto poder adquisitivo,
los más atractivos para la oferta del juguete español.
Así, la clase media, constituida aproximadamente por el 33% de
los hogares mexicanos, equilibra la calidad y el precio a la hora de comprar
juguetes, lo que favorece a un producto como el español que es visto
como un artículo que tiene garantizada la calidad.
Los
consumidores con gran poder adquisitivo (un 2% de los hogares del país)
no escatiman en gastos a la hora de adquirir juguetes, especialmente
videojuegos y juegos electrónicos, generalmente importados.
Los
mayores consumidores de juguetes en México son los niños entre 8
y 12 años, y entre los juguetes más vendidos se encuentran las
muñecas y las pelotas. Además, los chavales son sensibles
respecto a las modas y pedirán a sus padres que les compren juguetes
relacionados con la película o serie de animación que se
encuentre en boga.
Un dato
importante a tener en cuenta es que el mercado mexicano del juguete es
altamente estacional. El 70% de las compras se realizan en épocas
navideñas y en fechas muy señaladas como el Día del
Niño, que se celebra a finales del mes de abril.
Existen
fuertes desequilibrios regionales en el país. Son los estados de las
regiones central, oeste y norte los más ricos e industrializados, los
que constituyen definitivamente las zonas con mayor capacidad de compra y, por
lo tanto, los más interesantes para el exportador
español.
La
distribución está muy desarrollada en el país y va desde
los populares mercadillos, llamados tianguis, hasta los centros comerciales de
lujo orientados a las personas con un gran poder adquisitivo.
Como
cuenta la Ofecomes, "existe un bajo poder de negociación con los canales
de distribución ya que ésta se encuentra concentrada en pocas
manos".
México es un mercado masificado en términos de
población, lo que hace que algunas estrategias publicitarias y
promocionales sean esenciales. Exposición
española
No existe
en México una gran feria comercial del sector, por lo que la
Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ)
organiza desde hace cinco años en colaboración con el ICEX y la
Ofecomes una exposición de juguetes españoles en la capital
mexicana.
Articulo
publicado en ''El Exportador"
Mayo 2005 |
